Los circenses en el Congreso de los Diputados

 Los circenses en el Congreso de los Diputados

Tras el circo de ayer en el Congreso de los Diputados, solo cabe esperar una esperpéntica y angustiosa legislatura.

Estaban los partidos nacionales defendiendo a nuestro país (unos más que otros) y la extrema izquierda, estos últimos radicalizados a lo venezolano o incluso a lo iraní. Además los de la “casta” y sus compinches llevaron una orquestra, ¡qué digo orquesta! ya les gustaría, llevaron una pachanga que hacia ruido, parecían a los que iban por las calles hace 30 años con una cabra, que a base de pegarle a la cabra y de hacer un estruendoso ruido, con una botella y una cacerola, la cabra subía a una escalera, para así pedir dinero en una gorra mugrienta que el cabrero se despegaba de la frente cada vez que la cabra llegaba a lo más alto de la escalerilla. Pues esto es lo que yo vi ayer en el Congreso. ¡Deplorable!

Normalmente en el Congreso siempre he visto a nuestros diputados/as bien vestidos, bien arreglados, aseados, en fin, como Dios manda. Pues ayer entre los podemitas destacaron por sus camisas sin planchar, pañuelos a lo iraní, peinados extravagantes, rastas, etc. ¿Esta gente no sabe cómo hay que vestir en el Congreso? Pues que no vayan. ¿Estos individuos nos representan? Pues sí que hemos tenido un cambio, pero a peor, ya lo creo.

Menuda farándula se montó con el muchacho de Bescansa, un pobre bebé manoseado por toda esa bancada de la “casta”. ¿Por qué no fueron todos los diputados con sus hijos? y el que no tenga que lleve al perro, gato, etc. Pues porque si fuese así, sería un cachondeo. Pues eso es lo que ayer vimos. Hasta un individuo que se toma el trabajo de diputado por el forro de sus vergüenzas, votó al niño de Bescans
a como presidente al Congreso. Que cambio de diputados… ¡Así nos va!

Visto lo visto ya sabemos cómo se toma el trabajo la extrema izquierda, lo que no entiendo es para que quieren los podemitas cuatro grupos parlamentarios, con sus cuatro portavoces, y por su puesto con sus cuatro subvenciones. ¡Corcholis! ¿Tienen la mochila llena de favores? Pero si acaban de empezar…

Ufff, en esta legislatura vamos a sufrir de lo lindo, tendremos esperpentos como ayer a menudo y siempre con los mismos circenses. Que nadie espere que esta izquierda tan radical vaya a trabajar para los españoles. Ya tienen el sillón, el sueldo, ahora ya no tienen que hacer nada. Eso sí, saldrán a dar el espectáculo de vez en cuando para cubrir el expediente.

Al finalizar la primera mañana de trabajo en el Congreso, Iglesias y Errejón se ponen a  llorar. Eso se llama afán de protagonismo. Mas espectáculo…

¿Este es el cambio del que tanto han presumido? ¿Así saben trabajar?

Ya lo dice Arturo Pérez-Reverte:

Autor: Hugo Martínez