Corría el año de 1588, Felipe II quería invadir Inglaterra, para destronar a la reina Isabel I, dar muerte a los herejes e instaurar el Catolicismo. Por aquel entonces España disponía de una Armada Invencible que Felipe II reforzó con otros buques dedicados al comercio, como “La Juliana”.
En verano de 1588 zarpó la Armada Invencible rumbo a Irlanda y en septiembre llegó. Por el camino tuvo que enfrentarse a fuertes tormentas y grandes tempestades, las cuales hicieron que fracasara toda la operativa, frente a las playas del condado de Sligo, situado al noroeste de la isla. Allí quedaron hundidos la mayoría de los navíos españoles, que además de pelear contra las inclemencias del tiempo se vieron obligados a defenderse de los buques incendiarios que mandaban los ingleses desde la costa. Tras el monumental desastre, el monarca, lo resumió con una frase: “yo no envíe mis naves a luchar contra los elementos». Frase que pasó a los anales de la Historia.
Pues bien, 425 años después y gracias al mal tiempo de la zona, han aparecido los restos del buque “La Juliana” frente a las playas del condado de Sligo, Irlanda. La ministra irlandesa de Arte, Heather Humphreys, visitó esta semana el lugar del hundimiento y declaró «hemos descubierto una gran cantidad de material fascinante y significativo que tiene una antigüedad de más de 425 años. Obviamente, este material tiene gran importancia histórica y arqueológica», destacó Humphreys.
Un equipo arqueológico ha desenterrado tres cañones fabricados entre 1588 y 1570, el año de la construcción de «La Juliana». Uno de esos cañones lleva grabada la imagen de Santa Matrona y una dedicatoria a esta religiosa, especialmente venerada en Cataluña. Estos se encuentran en excelentes condiciones de conservación, según fuentes del Ministerio irlandés de Arte, Patrimonio y Cultura Gaélica.
Los expertos creen que cerca de «La Juliana» se encuentran también los restos «La Lavia» y «La Santa María», otros dos navíos pertenecientes a la Armada que se hundieron frente a las costas de Sligo, pero que podrían permanecen aún ocultos bajo la arena.
La Juliana era un buque de grandes dimensiones, con un peso de unas 860 toneladas y capacidad para transportar 32 cañones, 325 soldados y una tripulación de 70 marinos. Su año de construcción data de 1570. La Juliana se dedicó al comercio entre España e Italia hasta que Felipe II lo integró, junto a otros 130 navíos, en la flota de la Armada Invencible.
En el día de hoy, cuando la noticia ha recorrido todos los periódicos y medios de comunicación, nadie ha dicho si España va a pedir que su buque venga a casa o si por el contrario se va a quedar en Irlanda.
Desde aquí quiero recordar, que con la Fragata Mercedes y después de mucho pelear con los piratas que la encontraron, dicho buque y todo su contenido esta en territorio español. Las monedas se pueden visitar en el Museo Arqueológico de Madrid, muchas partes del barco están en el Museo Naval de Madrid, etc.
¿Recuperaremos el buque La Juliana con toda su dotación?
Autor: Hugo Martínez Alonso
Fragata Blas de Lezo 
No era la armada invencible, ese nombre se lo pusieron los ingleses como burla y nosotros reproducimos su burla, ¡¡¡parecemos tontos!!!. Su nombre era la felicisima y Grande armada.
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Jajajaj. Muy buena.
Puede ser lo que tu dices.
Pero hay que reconocer que por aquel entonces los mejores barcos, oficiales y marineros los tenía ESPAÑA.
Para mi, dejamos de tener los mejores en buques después de Trafalgar.
Un saludo.
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